La directora de estándares europeos de ASTM International habla sobre la creación de relaciones, la respuesta a los retos y las enseñanzas que se pueden adquirir de la comunidad europea de estándares.

By JP ERVIN

Sep 28, 2023

Como Directora de Asuntos Europeos de ASTM International, ¿cuáles son, en su opinión, algunos de los principales proyectos y objetivos de nuestra Oficina de Bruselas?

Me siento orgullosa de haber dirigido nuestra Oficina de Bruselas durante los últimos 10 años, supervisando una amplia gama de actividades que reflejan el amplio alcance del trabajo de ASTM International. La Oficina de Bruselas funciona bajo la supervisión directa de la división de Política Global, Cooperación y Comunicación, a cargo de nuestro vicepresidente, Jeff Grove. Nuestro principal objetivo es establecer conexiones y relaciones sólidas con las instituciones europeas, las organizaciones internacionales y otras partes interesadas importantes en Bruselas y en toda Europa.

Mantenemos estrechas relaciones con las organizaciones europeas de estandarización y sus miembros nacionales, los organismos de la ONU en Ginebra y Viena, y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con sede en París. Además, colaboramos con representantes de la industria de diversos sectores. Una de nuestras tareas esenciales es hacer un seguimiento de las políticas y la legislación de la UE que puedan afectar las iniciativas de ASTM, y ofrecemos coordinación e información si procede.

Aparte de estas responsabilidades fundamentales, nuestra Oficina de Bruselas ofrece apoyo a otros departamentos de ASTM. Colaboramos activamente con las operaciones de los comités técnicos a través de la interacción con nuestros miembros de la Unión Europea (UE), el desarrollo de una correlación entre las partes interesadas y la aplicación de estrategias de difusión. Mediante el compromiso activo con las partes interesadas europeas, el estrecho seguimiento del desarrollo de las políticas y la identificación de oportunidades de colaboración, nuestra Oficina de Bruselas desempeña un papel crucial en la promoción de la misión de ASTM y en la ampliación de su relevancia en los ámbitos europeo y mundial.

En su opinión, ¿cuáles son los principales problemas, retos y oportunidades de ASTM en su colaboración con la comunidad europea de estandarización y regulaciones?

Trabajar con la comunidad europea de estandarización y regulaciones presenta tanto oportunidades como retos para ASTM. La UE ofrece un sólido mercado comercial, lo que la convierte en una región atractiva para la participación de ASTM. Asimismo, desde un punto de vista técnico, el creciente número de miembros de ASTM, más de 2000 expertos de los estados miembros europeos que participan en varios comités técnicos, aumenta el alcance global y la relevancia de nuestras actividades de desarrollo de estándares.

Uno de los retos importantes para ASTM es sortear el panorama regulatorio europeo, caracterizado por un sistema de estandarización muy centralizado y controlado. El modelo del Nuevo Marco Legislativo (NLF) sustenta varias categorías de productos y servicios, que se apoya únicamente en los organismos europeos de estandarización (CEN, CENELEC y ETSI) para desarrollar estándares que respalden los objetivos regulatorios.

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Además, las leyes europeas y las políticas recientes dan preferencia a los estándares elaborados según un enfoque de “delegación nacional”, diferente al modelo abierto de participación de ASTM, en el que las personas participan y votan directamente como individuos, sin tener en cuenta el país o la región de la que procedan. Me complace señalar que la OCDE ha publicado un estudio de caso sobre ASTM y cita nuestra “estructura única de afiliación”, la “participación abierta” y el “proceso de toma de decisiones inclusivo y representativo” como características que permiten a ASTM International elaborar de manera rápida estándares en mercados ágiles “en especial, en torno a nuevas tecnologías de producción clave”.

Estas preferencias en la legislación y las políticas de la UE dificultan que los estándares que no son europeos (EN), las normas que no son ISO, se incluyan como referencia en el cuerpo de los EN. Abordar estas cuestiones requiere esfuerzos a nivel institucional. Tenemos la suerte de contar con el apoyo de nuestros representados y de los aliados de la industria que buscan una mayor armonización técnica mundial en los estándares que respaldan las regulaciones y el comercio.

En su opinión, ¿qué valor aporta ASTM a los esfuerzos europeos en materia de estándares?

El valor que ASTM aporta a los esfuerzos europeos en materia de estándares reside en nuestro compromiso con la coherencia y el trabajo en colaboración con las partes interesadas europeas. Respetamos los atributos del sistema europeo de estandarización, que han contribuido a construir un mercado único europeo sólido y coherente. Con este entendimiento, creemos en la importancia de la colaboración y de aumentar la compatibilidad técnica para minimizar las divergencias y las discordancias entre los estándares EN y ASTM. Nuestros esfuerzos se centran en promover el intercambio técnico, evitar duplicaciones innecesarias y ofrecer soluciones pertinentes para el mercado en el momento oportuno.

El sistema europeo de estandarización puede beneficiarse de un planteamiento más flexible a la hora de reconocer soluciones técnicas globales, en especial, cuando se prevén necesidades futuras. Los sectores que históricamente han adoptado un enfoque de múltiples vías para los estándares internacionales demuestran el éxito de este planteamiento. Por ejemplo, en ámbitos como la seguridad nuclear, los combustibles de aviación sostenibles y sintéticos, y en el diseño y el funcionamiento de aeronaves de aviación general y sistemas de aeronaves no tripuladas (UAS), los estándares de consenso mundial de ASTM desempeñan un papel crucial. Son herramientas clave reconocidas y citadas por las autoridades europeas para cumplir las regulaciones vigentes en estos ámbitos.

Por otro lado, ¿cómo cree que ASTM se beneficiará de un mayor compromiso con la comunidad europea de estándares y nuestros miembros en Europa y los estados miembro de la UE?

Eso es vital. En la actualidad, ya tenemos acuerdos de Partner Standards Developing Organization (PSDO) con ISO y con IEC, así como un memorándum de entendimiento (MoU) para facilitar la cooperación técnica con el CEN. También, tenemos acuerdos con EUROCAE y ASD-STAN en el ámbito aeroespacial. Estamos satisfechos con la cooperación que hemos establecido con agencias y organismos de la UE, como el Centro Común de Investigación (JRC), la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) y la Organización Europea de Aprobación Técnica (EOTA). Además, agradecemos la creciente participación de los miembros europeos que se involucran de forma activa en ASTM para el desarrollo de estándares globales en tecnologías emergentes y digitales. Entre ellas figuran aplicaciones de fabricación de aditivos, servicios para la gestión del tráfico de UAS y muchas otras. De cara al futuro, los miembros de la UE y las partes interesadas están bien posicionados para contribuir al desarrollo continuo de las actividades de ASTM en materia de descarbonización y estándares de emisiones netas cero. Todos estos esfuerzos contribuyen significativamente a reforzar la reputación y relevancia de ASTM como miembro respetado de la comunidad mundial de estándares.

¿Puede hablarnos de su trayectoria? ¿Qué la llevó a interesarse por el mundo de los estándares y la regulación y, finalmente, a trabajar para ASTM?

Tengo formación jurídica y estoy colegiada en Italia. Mi primer trabajo fue en una consultora italiana, donde me centré en ayudar a las pequeñas empresas italianas a superar las barreras técnicas del comercio en la Unión Europea. Estos obstáculos solían derivarse de requisitos y estándares nacionales que no se ajustaban a la legislación europea vigente. Fue durante mis veintitantos años cuando me encontré por primera vez con los estándares, aunque aún no sabía que mi carrera giraría en torno a los estándares.

Posteriormente, me trasladé a Bruselas y pasé algunos años trabajando para NORMAPME, la entidad europea que representa a las pequeñas y medianas empresas dentro del sistema europeo de estandarización (que ahora se conoce como SBS). Cuando surgió la oportunidad de trabajar en ASTM, se despertó mi curiosidad intelectual y me pareció una progresión natural en mi trayectoria profesional relacionada con los estándares. Ya había experimentado la perspectiva nacional con la empresa italiana, ampliada a la dimensión europea y ahora estaba lista para embarcarme a nivel mundial con una organización de estándares verdaderamente internacional.

Sara Gobbi es Directora de Asuntos Europeos de ASTM International. Su función principal, al frente de la Oficina de Bruselas, es realizar actividades de difusión y aumentar la concienciación sobre ASTM entre las instituciones europeas, las asociaciones empresariales y comerciales, los grupos ecologistas y de consumidores, y otras partes interesadas europeas importantes.