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By Adele Bassett
Dec 23, 2020
Cuando el Huracán Andrew atravesó el estado de Florida y los estados de la Costa del Golfo en agosto de 1992, alcanzó la categoría 5 de intensidad y causó daños catastróficos. El Comité E06 de ASTM sobre Comportamiento de Edificios respondió mediante el desarrollo de un método de prueba y una especificación relacionada con el desempeño de las ventanas exteriores, los muros cortina, las puertas y los sistemas de protección de impacto afectados por los escombros arrastrados por el viento en los huracanes. El objetivo era hacer edificios mas resistentes o con mayor capacidad para soportar desastres naturales y recuperarse de ellos de forma más rápida.
En la actualidad, tras el Huracán Katrina y la Supertormenta Sandy, y con predicciones de fenómenos meteorológicos severos crecientes en todo el mundo, los miembros de ASTM están desarrollando una nueva guía para la evaluación de la resiliencia de edificios (WK49227). Dirigidos por el Subcomité E06.55 sobre el Comportamiento de Cerramientos de Edificios, este esfuerzo ayudará a las municipalidades, los profesionales de diseño, los propietarios y los gerentes de instalaciones.
Los objetivos principales de la implementación de estrategias de resiliencia son proteger a las personas y a las inversiones inmobiliarias, y disminuir la interrupción de nuestras actividades cotidianas por eventos adversos, dice Brett Farbstein, el contacto técnico de ASTM para el nuevo elemento de trabajo. Farbstein, un ingeniero experimentado en puesta en servicio y gerente de proyecto para CanonDesign, también conduce el Grupo de Trabajo de Resiliencia de su empresa.
Hay una gran cantidad de información disponible sobre la resiliencia de edificios que ya incorpora las normas ASTM. Esto incluye la Guía Integral de Diseño de Edificios en línea (gestionada por el Instituto Nacional de Ciencias de la Construcción) y un catálogo en línea desarrollado por el Instituto Nacional de Normas y Tecnología. Sin embargo, Farbstein señala que todavía no hay una norma integral de resiliencia de construcción o una herramienta de evaluación disponible.
Una manera de definir la resiliencia es la capacidad de un material, montaje o construcción integral para recuperarse de la exposición, dice Theresa Weston, una colega técnica de DuPont Building Innovations. La resiliencia depende de la naturaleza y el grado de exposición y de la capacidad de cierto material, montaje o construcción para volver a una condición operativa. La resiliencia comienza con la durabilidad frente a condiciones normales y luego se expande hacia la resistencia o capacidad de recuperación ante exposiciones extremas de corta duración.
En otras palabras, la resiliencia de construcciones es un tema particularmente amplio que abarca todo tipo de escenarios asociados con eventos naturales cotidianos y extremos, como fuertes precipitaciones, inundaciones, vientos fuertes, tormentas de nieve, terremotos, calor y frío extremos, y catástrofes de origen humano, como el terrorismo. Así que asegurar la resiliencia de una construcción puede abarcar desde la instalación de aislamiento adecuado, ventanas funcionales y dispositivos de protección solar, hasta la colocación de equipos mecánicos en el techo, y el empleo de más materiales a prueba de explosiones.
La nueva guía de ASTM propuesta para evaluar la resiliencia de una construcción probablemente incluirá las pruebas y la selección de los componentes de construcción, las operaciones y el mantenimiento de la construcción, y el rendimiento general de la construcción. Además de incluir las normas ASTM existentes, la guía también identificará áreas en donde se necesiten nuevas normas.
El grupo Farbstein ha elaborado una lista de casi 50 normas ASTM publicadas y cinco elementos de trabajo relacionados con la guía propuesta. Las normas abarcan cuestiones tales como:
Las normas relacionadas con la limitación de daños por agua son especialmente importantes, dice Weston. Al examinar la resiliencia de un material, sistema o construcción, debemos asegurarnos de incluir la exposición a precipitaciones de larga duración. Un gran porcentaje de fallas de construcción están asociadas con la entrada de agua en niveles bajos por un período de tiempo largo, que debe seguir tratándose, al abordar eventos singulares, de exposición extrema.
En especial, se cita la importancia de las guías ASTM para limitar el daño causado por el agua en las construcciones, mediante la evaluación de las filtraciones de agua en las paredes de construcción y el diseño y la construcción de sistemas de construcción de paredes con marcos bajos para resistir la intrusión del agua. En particular, el grupo Farbstein planea incorporar los métodos de prueba ASTM asociados con la resistencia a los daños por inundaciones y una guía para el uso de la tecnología de infrarrojos para la investigación de la intrusión de agua en construcciones.
Dos elementos de trabajo adicionales abordarán el diseño de construcciones para proporcionar protección física a amenazas de vehículos y para proteger el exterior de una construcción ante la explosión de cargas de ataques terroristas.
La guía propuesta para la evaluación de la resiliencia edilicia incluirá el aporte de varios comités, especialmente aquellos que tratan con los materiales de construcción y montajes. Esta colaboración involucrará al Comité D08 sobre Techado e Impermeabilización, C11 sobre Yeso y Materiales y Sistemas de Construcción Relacionados y C16 sobre Aislamiento Térmico.
Farbstein agrega: Cabe prever que el tema de la resiliencia eventualmente incluirá comités que lidien con los servicios públicos y la infraestructura del transporte, porque la resiliencia también es un tema municipal y regional que va más allá de las construcciones individuales, sin embargo tiene un impacto directo en las operaciones y la recuperación de la construcción.
Los esfuerzos del Subcomité E06.55 complementarán la labor en curso del NIST para crear un Marco Comunitario de Resiliencia de Desastres, y establecer un Centro de Excelencia Comunitario de Resiliencia, así como un Panel de Normas de Resiliencia de Desastres que servirá de guía a los gobiernos locales y sugerirá la elaboración de nuevas normas.
Si miramos hacia el futuro, la resiliencia edilicia será un foco continuo de atención del Comité E06. Es una buena opción para nuestro comité, sostiene Anne Spinks, presidente del comité e investigadora científica con H.B. Fuller en Minnesota. A medida que la idea de resiliencia edilicia se generalice, se desarrollarán más normas relacionadas al funcionamiento de las construcciones.
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Una construcción bien diseñada puede ser hermosa y perfecta para su propósito. También debe resistir las fuerzas de la naturaleza. Los efectos devastadores de los daños por humedad luego del Huracán Katrina y la Supertormenta Sandy son simplemente dos ejemplos de impactos a largo plazo.
Para ayudar a aquellos que diseñan, construyen, venden, mantienen y son dueños de sus propias construcciones, a prevenir o afrontar los daños por humedad, un manual ASTM aborda Control de la Humedad en los Edificios, Factor Clave en la Prevención de Moho (Manual 18). El libro de más de 600 páginas dividido en 28 capítulos, se enfoca en aspectos de diseño, selección de material, y construcción de edificios que resistan la humedad.
El manual incluye cuatro partes que abarcan:
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Adele Bassett es escritora independiente y ha cubierto temas que van desde las pandillas juveniles de Colorado hasta los sismos de Connecticut al tiempo que trabaja para diferentes corporaciones y publicaciones. Tiene una licenciatura en lengua inglesa, una maestría en periodismo y un M.B.A.
May / June 2015
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